No hay confirmación oficial al respecto, pero según The Verge, Samsung podría haber aumentado en un 20% el precio por el que vende los procesadores de aplicaciones (AP) para iPhone/iPad a Apple.
Según el reporte original, un informe de Chosun Biz (no os molestéis en entrar porque no entenderéis nada), Apple rechazó este aumento significativo pero que, ante la falta de proveedores para reemplazarlo, se vio obligado a aceptarlo.
No debemos olvidar que estos procesadores son diseñados por Apple, pero fabricados por Samsung. En el pasado Apple pudo comprar proveedores fabricantes de memoria RAM o Flash, y Samsung se estaría cavando (si es que no se lo ha cavado ya) su propia tumba al subir a su antojo estos precios, buscando que Apple se busque otro fabricante capaz de cumplir con la alta demanda en la producción de estos procesadores.
De momento, el contrato por el cual ambas compañías están unidas en la fabricación de estos procesadores tiene vigencia hasta 2014.