Con la mosca detrás de la oreja estan los de iFix tras haber analizado uno de los últimos iPhone entregados por Apple. Y es que al parecer, la compañía podría haber hecho algunas modificaciones en su hardware sin haberlo avisado.
Según podemos leer, podrían haber cambiado el plástico negro, que no sería tan negro en las nuevas unidades. Además, el aluminio es más mate que el anterior y ahora podríamos ver el sensor de proximidad (antes no se podía).
Estas modificaciones podrían aminorar los problemas de cobertura de los que se quejaban algunos, así que estaremos atentos a las novedades que se produzcan.