La posibilidad de que Apple haga llegar al mercado dos nuevos dispositivos con pantallas de 4.7 y 5.6 pulgadas a lo largo de este 2014 se reitera con el aluvión de informaciones al respecto que día tras día se vierten en la red a través de diferentes medios digitales. No obstante, desde Japón llegan algunos datos que no pasan inadvertidos en absoluto y cuya veracidad debe ser convenientemente cuestionada.
No obstante, no podemos evitar hacernos eco del supuesto tratamiento ‘experimental’ al que Apple somete el más grande de los dispositivos, el cual podría no utilizar el nombre de ‘iPhone’ como distintivo de la familia a la que podría pertenecer.
Claro está que un dispositivo de dimensiones próximas a las seis pulgadas rozaría los límites de la filosofía de producto con la que Apple ha vestido su teléfono inteligente desde su origen. Sin embargo, cierto grado de escepticismo nos lleva a pensar que, de ser cierta su comercialización en el transcurso del tercer trimestre del presente año, lleve a los de Cupertino a sacarse de la manga una nueva denominación para una nueva familia de producto cuya única diferencia, a priori, pueda ser el tamaño de la pantalla.
Por otro lado, y a pesar de los esfuerzos de Apple de tener a punto su nueva planta de fabricación de cristal de zafiro en Arizona, últimos datos apuntan que el futuro iPhone de 4.7 pulgadas continuaría usando Corning Gorilla Glass, quedando la producción saliente de dicha factoría orientada hacia un supuesto iWatch. ¿Quién da más?