Conocido popularmente como “iYate”, el barco diseñado por Steve Jobs antes de su muerte, cuya fabricación corrió a cargo de la empresa naviera Feadship, por fin ha podido dirigirse hacia Estados Unidos.
El barco permaneció en el puerto de Santa Cruzde Tenerife (Islas Canarias) desde el pasado 4 de enero y partió hacia Palm Beach (Florida) después de 5 días de descanso para sus 15 tripulantes y el correspondiente abastecimiento.
Con sus 78 metros de eslora y sus 1876 toneladas, VENUS, que así se llama, es la culminación de uno de los grandes sueños de Steve Jobs, que no pudo disfrutar del barco en vida. En una de las muchas conversaciones con Walter Isaacson para completar su biografía se podía leer en referencia al barco:
“Es posible que muera y deje a Laurene [su viuda] un barco a medio construir, pero tengo que seguir trabajando en su desarrollo, porque de otra manera sería admitir que estoy a punto de morir”.
El proyecto sufrió múltiples retrasos debido a la obsesión por los detalles del perfeccionista Steve Jobs. Y ha sido el pasado 28 de octubre de 2012, después de un año de su fallecimiento, cuando pudo verse por primera vez esta obra de arte en la ciudad de Aalsmeer (Holanda). En la botadura del barco estuvieron presentes la viuda e hijos de Steve Jobs, que dirigieron unas palabras al equipo encargado de llevar a buen término esta difícil empresa:
“Gracias por vuestro duro trabajo y vuestra destreza”.
Como curiosidad: cada uno de los trabajadores fue obsequiado con iPod dedicado por los familiares.
El barco, de líneas minimalistas y diseño cuidado al que estamos tan acostumbrados en cada uno de los productos de Apple, busca la pureza de las formas, consiguiendo con sus amplias cristaleras la luz que su diseñador buscaba.
Los interiores recuerdan en gran manera la estética seguida por las Apple Store, y corren de la mano de Philippe Starck. Ya en su momento se rumoreaba que podría estar trabajando para un producto de Apple, pero realmente este era el proyecto que ocupaba sus horas.
Valorado en más de 100 millones de euros, cuenta con algunas características al alcance de muy pocos. Un jacuzzi en la proa, una cubierta de teca, sus puertas correderas de cristal o los 7 iMac de 27 pulgadas, que dirigen y controlan la embarcación, son algunas de sus flamantes características.
Tras haber estado en Amsterdam durante los últimos meses (a la espera de que se completara el pago que aún quedaba pendiente) y después de una mejoría en el tiempo que permitiese su partida, VENUS pudo surcar el océano rumbo al continente americano.
Después de ver en primera persona cómo se desliza sobre el mar, solo puedo repetir una cita del que siempre será el “alma mater” de Apple:
“Acostarme por la noche y pensar que he hecho algo genial. Eso es lo que más me importa.”
Y sin duda alguna este barco, es genial.