La friolera cantidad de 1.000 millones de dólares (unos 700 millones de euros) es lo que Google paga anualmente a Apple para ser el buscador por defecto en nuestros dispositivos iOS.
Si analizamos que actualmente hay en el mercado más de 316 millones de dispositivos iOS, a Google le interesará este acuerdo con Apple para estar presente en tal cantidad de navegadores Safari.
Por otra parte, Google también se ve favorecido al obtener unos ingresos de 335 millones de dólares en concepto de publicidad a través de las búsquedas que hacemos desde Safari.
Por lo tanto, nos encontramos ante un acuerdo en los cuales ambas compañías salen ganando.